En 2020 las velas de la nave «Argo» se hincharon con nuevos vientos, la tripulación agitada preparó su impedimenta, un nuevo viaje iba a comenzar. Nuestro espíritu aventurero, nuestro afán de conocimiento, nuestra curiosidad innata y los indestructibles lazos que unen a la comunidad argonauta son la energía que impulsó en medio de la pandemia